lunes, 25 de abril de 2016

Estos son los impactantes efectos del LSD

Las primeras imágenes del cerebro humano bajo los efectos del LSD tumban muchos de los mitos en torno a la droga

Scan Rejects

El LSD hace que nuestro cerebro sea más completo. Esa es la conclusión a la que ha llegado un nuevo y controvertido estudio que ha probado los efectos que tiene esta droga psicodélica en el cerebro humano.
Para poder realizar el estudio, 20 voluntarios física y mentalmente sanos accedieron a hacer un viaje en nombre de la ciencia.
El experimento se realizó en dos partes. En una primera sesión cada uno de los voluntarios recibió una dosis de 75mcg de LSD. Al día siguiente, a las mismas personas se les administró un placebo.
Los resultados desmienten muchos de los mitos extendidos acerca de esta sustancia.
Generalmente, las partes de nuestro cerebro funcionan de forma separada, cada una completando su función. Al someter a los voluntarios a un escáner cerebral, los investigadores descubrieron que el cerebro empieza a funcionar de forma conjunta tras la ingesta de LSD.
Cada porción de nuestra mente se integra, se une y hace que el órgano clave funcione de una forma mucho más completa de lo que lo hace normalmente.
"Normalmente, nuestro cerebro está formado por redes independientes que realizan funciones independientes especializadas, tales como la visión, el oído o el movimiento", declaró Robin Carhart-Harris, director de la investigación. "Sin embargo, bajo los efectos del LSD esta separación de redes se rompe y se ve un cerebro más integrado y unificado".
Este es el escáner que demuestra el funcionamiento del cerebro bajo los efectos del LSD y bajo los de un placebo.
Como se ve en la imagen, la actividad general del cerebro tras el consumo en LSD es notablemente superior al del cerebro tras la ingestión del placebo.
Además, los escáneres revelaron que, gracias al poder alucinógeno de esta droga, las personas que la tomaron comenzaron a "ver" no solo con la corteza visual, que es la que se activa en la visión normal, sino también con otras partes de su cerebro.
Incluso con los ojos cerrados, los voluntarios veían imágenes en su cabeza correspondientes a su imaginación o a retazos de su memoria olvidados en el fondo de la mente.
Según los investigadores, estos efectos podrían explicar sentimientos religiosos que la gente siente a menudo después de tomar la droga y la sensación de bienestar que continúa presente en el cuerpo después de que sus efectos hayan pasado.
El estudio, ha demostrado que el LSD también potencia lo que se conoce como "ego-disolución", es decir, el sentido normal del "yo" se descompone y se sustituye por un sentido de la reconexión con tu ser, los demás y el mundo natural.
Al romper las limitaciones del cerebro que funciona de forma separada, los voluntarios volvieron a un estado que se parece más a la infancia, cuando sus cerebros se encontraban libres y sin restricciones.
Durante nuestra madurez, nuestro pensamiento se vuelve más limitado y rígido. El profesor David Nutt asegura que conocer tan a detalle los efectos del LSD sobre el cerebro podría ayudar a revertir las restricciones al pensamiento que se imponen cuando pasamos de la infancia a la edad adulta, facilitando la recuperación de parte de esa imaginación perdida a lo largo de los años.
David Nutt, profesor de Neuropsicofarmacología, ha declarado que los neurocientíficos han estado esperando 50 años para este momento.
"Esto es para la neurociencia lo que el bosón de Higgs fue para la física de partículas", declaró Nutt, que en 2009 fue removido de su cargo de asesor de drogas del Gobierno Británico por declarar que el éxtasis y el LSD son menos peligrosas para la salud que el alcohol y el tabaco.
El LSD fue sintetizado por primera vez en 1938 y en los 50 y 60 tuvo un impacto importante en la psicología y en la investigación psiquiátrica.
Su adopción como droga recreativa de la juventud de los 60 hizo que se prohibiera su uso y se dejara de investigar su potencial como tratamiento de trastornos psiquiátricos, depresiones y adicciones.
Ahora este estudio, parcialmente financiado a través del crowdfunding, el primero de sus características realizado hasta ahora sobre los efectos neurológicos del LSD en humanos, ayuda a reabrir el debate en torno a su potencial como cura y a profundizar en el conocimiento del funcionamiento de nuestra conciencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario